Caja de Arena

La terapia con caja de arena (o sandplay therapy en inglés) es una forma de psicoterapia no verbal que utiliza una caja llena de arena y una variedad de figuras y objetos en miniatura para ayudar a las personas a expresar y procesar emociones, pensamientos y experiencias difíciles. Esta terapia es especialmente útil para aquellos que tienen dificultades para verbalizar sus sentimientos o para los niños que aún no tienen un lenguaje emocional desarrollado.

Es útil para:

  • Personas con ansiedad o fobias específicas
    → La arena permite expresar miedos sin tener que verbalizarlos.

  • Trastornos del estado de ánimo (como depresión o distimia)
    → Facilita el contacto con emociones bloqueadas.

  • Situaciones de trauma o abuso 
    → Ayuda a representar vivencias dolorosas de forma segura y contenida.

  • Duelos no elaborados o separaciones difíciles
    → Brinda un canal simbólico para procesar pérdidas.

  • Personas con mutismo selectivo o dificultades de comunicación verbal
    → El lenguaje simbólico de la caja reemplaza la necesidad de hablar.

  • Dificultades de apego o vinculación
    → Crea un espacio seguro que favorece el vínculo terapéutico.

  • Síndrome de Tourette o tics nerviosos
    → Favorece la autorregulación emocional y reduce el estrés.

  • Trastornos psicosomáticos (dolores recurrentes sin causa médica clara)
    → Permite simbolizar el malestar corporal.

  • Crisis vitales, cambios escolares o mudanzas recientes
    → Ofrece estabilidad y contención en momentos de transición.

Caja de Arena Terapéutica

"Un espacio seguro para explorar, crear y sanar"

También indicada para niños y adolescentes con:

• Alta capacidad intelectual
• TDAH o TDA
• Trastornos de conducta
• Dificultades sociales
• Alta sensibilidad emocional
• TEA nivel 1
• Doble excepcionalidad

La Caja de Arena ayuda a:

• Procesar emociones
• Equilibrar mente y emociones
• Fortalecer autoestima
• Explorar conflictos internos con libertad
• Desarrollar tolerancia a la frustración y autorregulación

“Para quienes piensan mucho y sienten aún más, la arena ofrece un lenguaje propio.”